Como hace dos años, hemos tenido la oportunidad de viajar a nuestro país hermano, Portugal; donde además del turismo estándar, hemos aprovechado para acercarnos a la cultura vitícola de este país. Hemos visitado algunas Quintas (o bodegas), hemos catado algunos vinos y nos hemos traído unas cuantas botellas para catarlas tranquilamente.
Desde la zona del valle del Duero portugués, queremos compartir nuestras impresiones sobre este vino elaborado en la Quinta do Cabeço, vino tinto Arrojo, DOC Douro.
Los vinos del Duero Portugués
Los vinos tintos del Duero Portugués son generalmente de carácter ligero, aunque de con una ligera turbidez y mucha presencia de frutos negros maduras. Al igual que en los vinos bañados por el Duero en Castilla y León, la gran exposición al sol en verano confiere un tanino muy fuerte que se integra en el vino.
La base de estos vinos es su origen, ya que la zona cultivada es agreste con grandes barrancos donde las parras se han asentado en terrazas. Esta característica, junto a la hospitalidad de la gente local está transformando esta región en la pequeña Toscana Portuguesa, siendo cada vez más un destino turístico entorno al vino. Así, incluso una parte de estos bancales de majuelos han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Tal y como entendimos, de la vasta producción de la zona, una gran cantidad de uva, se traslada a las bodegas de Oporto para la elaboración de vinos de Oporto, que, en nuestra opinión, nada tienen que ver con nuestro concepto de vino.
Comentario de cata del vino tinto Arrojo DOC Douro
Variedades de uva: Coupage de variedades Touriga Nacional , Tinta Roriz , Touriga Franca y Tinta Barroca.
Origen: Procedente del valle del Duero, DOC Douro.
Características
Visualmente presenta una coloración rojo rubí muy luminoso, aunque con una ligera turbidez, que no molesta. Tiene un ribete purpurado.
Aromáticamente tiene una gran presencia de frescura con toques florales y a hierba fresca. Posiblemente se lo mejor que podamos encontrar en este vino tinto Arrojo.
Al paladar es una mezcla diferente a lo que estamos acostumbrados, ligeramente subido de acidez, aunque con bastante astringencia por la presencia de los taninos. Correcto, aunque sin enamorarnos.
Nuestra impresión
Ligeramente ácido, achacable a que es joven y puede que no se haya conservado correctamente. El tanino se ha caído ligeramente por paso del tiempo, no por un paso por barrica, por lo que sigue poseyendo una cierta frescura con un postgusto alargado, aunque sin intensidad.
Es un vino de mesa correcto, pero que no nos deja un gran recuerdo. Esperábamos más. A lo largo de nuestro viaje hemos encontrado cosas mejores, y tenemos pendiente de catar con calma otros vinos aparentemente mejores.
Propuesta de maridaje
Es vino que no recomendaríamos para una gran ocasión, pero que sí es perfecto para una copa de vino al día. Frente a carnes muy especiadas o de gran sabor, no tiene suficiente cuerpo, no obstante, para carnes blancas y embutidos, puede funcionar muy bien.
Este vino lo tomamos en su zona de origen, por lo que, aunque como vino por sí solo no es una gran cosa, armonizaba perfectamente con la especialidad de la casa del restaurante de Taboaço donde comimos. Un cordero lechal asado, con una guarnición de verduras, patatas asadas y arroz blanco. Es decir, una carne blanca. Porque estas riberas del Duero, también tienen su plato de cordero asado.
Cómo has podido comprobar, no solamente hay vinos en el Duero a su paso por Castilla y León, también en las regiones portuguesas se cultiva y se vinifican vinos. No hemos empezado por el mejor, iremos comentado poco a poco otros vinos portugueses que tenemos. Pero, si conoces los vinos portugueses ¿Qué vino portugués nos aconsejas buscar en nuestro próximo viaje? Déjanos un comentario con tu sugerencia.
