Si algo está caracterizando el año del confinamiento forzoso en casa es que, estamos disfrutando de muchos y muy buenos vinos. Al poder estar menos estresados por los tiempos, nos ha permitido disfrutar de vinazos que igual, en un tiempo más estándar, no nos lo hubiéramos podido permitir. Así, acabamos de disfrutar de estos dos magníficos tintos de Bodegas Corral, el Altos de Corral reserva 2010 y el Altos de Corral crianza 2016.
Así, se nos desmonta otro mito que teníamos asociados a los vinos de la DOCa. Rioja, como vinos de una muy marcada barrica. Y es que llevamos tiempo observando cómo estos vinos están evolucionando a son de recuperar los sabores de la fruta, aunque sin renunciar a la barrica.
Y es que recientemente disfrutamos también de este vino, atractivo e interesante aunque a nuestro gusto no llega a su “hermano”, el Vendimia Seleccionada Don Jacobo 2018, pero aun así, no deja de sorprendernos el equilibrio encontrado entre fruta y barrica.
Las Bodegas Corral
Nuevamente nos volvemos a encontrar con un vino procedente de esta bodega; bodegas Corral, una interesantísima bodega centenaria en La Rioja localizada en el pueblo de Navarrete. Se da la circunstancia de la visitamos el año pasado realizando una escapada de enoturismo, en el que además de vivir la experiencia del vino, en esta bodega se vive intensamente el Camino de Santiago. La puerta de la bodega se encuentra en el mismo Camino Jacobeo y de hecho, en su patio trasero se encuentran los restos del que fuese un Hospital de peregrinos de la Orden de los Caballeros Hospitalarios de San Juan.
Así pues, la experiencia global aúna unas condiciones únicas de la historia del Camino, junto a la elaboración de vinos de calidad procedentes de la DOCa. Rioja, una de las más prestigiosas del mundo. Para ello, a la hora de elaborar vinos, la apuesta de bodegas Corral, es innovar en la creación de vinos sin renunciar a la esencia. Así se consigue hacer un auténtico disfrute, cuando se hace “una parada en el camino”, como reza su lema.
El viñedo, el origen de todo
Para elaborar un buen vino, hay que partir de una buena materia prima, la uva; y en este caso, la uva proviene de un majuelo de 10 hectáreas de extensión en la Navarrete, a unos 600 metros de altitud. La finca Altos de Corral, una pacerla de naturaleza arcillosa y calcárea al norte y aluvial al sur. Un buen trabajo en la cuna se trasladará a la botella final.
Cata del Don Jacobo Altos de Corral reserva de 2010
- Variedad de uva: Monovarietal de tempranillo o tinta fina del país.
Origen del vino: Vino tinto amparado por la DOCa. Rioja.
Vinificación: Vendimia seleccionada, con una crianza en barrica de roble francés durante 24 meses y un redondeo mínimo en botella por otros 12 meses más.
Características del vino
En copa se le ve un aspecto brillante y limpio, con una capa alta de un precioso color rojo granate con ribete purpurado empezando a tomar ese color teja de la crianza.
Aromáticamente es intenso, destaca unos frutos rojos maduros y ligeramente dulces, aunque al abrirse, se detectan aromas más vainilla, que imaginamos que proceden de la prolongada crianza en la barrica francesa.
En la boca es una explosión de sabor, aunque no dura tanto como nos gustaría. Destaca la fruta madura y la madera sutil pero innegable. Tiene bastante estructura, llenando completamente el paladar. Tiene un retronasal largo, aunque menos intenso al final.
Nuestras impresiones
Este vino es muy agradable, atractivo y «fresco» para ser un clásico DOCa. Rioja, si bien después de haber conocido el Vendimia Seleccionada se nos queda corto a nuestro gusto, aunque sigue siendo muy potente. Es un vino transitorio entre los vinos más clásicos y que caracterizaron a los vinos de Rioja, y las nuevas elaboraciones. Es le vino que recomendaríamos para gente más partidaria de los toques a madera, para que se reencuentren con la fruta que nuestro entender tiene que estar dominando los sabores y aromas del vino.
Y aunque a nosotros no nos llega a enamorar como vino, entendemos que está bien trabajado, con un objetivo claro de posicionarse en ese mercado de vinos que siguen manteniendo una larga crianza muy clásica pero que empieza a disfrutar de vinos más frescos. En ese sentido, es todo un acierto, aunque no sea nuestro subjetivo gusto.
Propuestas de armonía
Es un vino muy estructurado, un cuerpo denso y potente, por lo que tendremos que buscar armonías con alimentos de sabores intensos, como carnes a la parrilla o carnes estofadas. Si es con quesos, estos deben de ser fuertes, para que el equilibrio entre vino y alimento se retroalimente. No es un vino para una ocasión informal, pero podría ser el rey en una mesa formal.
Nosotros lo hemos disfrutado en dos armonías diferentes, aunque marcadas por la carne. Con unas carrilleras al vino tinto, donde la salsa de vino era igualmente potente y destacó muy bien. Aunque donde realmente funcionó maravillosamente fue con unos chuletones bistecca alla fiorentina, donde la carne se hace con mantequilla y aceite, donde emulsionan tomillo y romero. Una gran explosión de sabor que precisa un vino que no se quede atrás.
Cata del Don Jacobo Altos de Corral crianza del 2016
Variedad de uva: Monovarietal de tempranillo o tinta fina del país.
Origen del vino: Vino tinto amparado por la DOCa. Rioja.
Vinificación: Crianza en barrica de roble americano durante 12 meses y un redondeo mínimo en botella por otros 12 meses más.
Características del vino
A simple vista destaca un precioso color rojo picota de capa alta, muy intenso de color y brillante con una leve corona ligeramente anaranjada.
Aromáticamente conserva más frescura de la que esperábamos, con unos frutos rojos maduros. Al abrirse se deja notar el paso por barrica con unos toques exóticos de vainilla.
En boca es suave y aterciopelado, menos intenso de lo esperado. Tiene estructura y cuerpo como para llenar completamente la boca con un tanino presente en una astringencia media y agradable.
Nuestras impresiones
Este vino carece de la potencia que esperábamos tras analizar el anterior, pero casi por eso es más fácil de tomar. Aunque la presencia de la barrica se nota atenuada y se le da un mayor protagonismo a la variedad de uva, con una presencia importante de frutos rojos maduros, como anteposición de los frutos negros del reserva, sigue siendo quizás excesivamente presente.
Agradable para una comida, un poco más acidez habría compensado una personalidad menos clásica. Reconociendo que es un vino bien elaborado no es capaz de transmitirnos eso que hace especial a otros vinos de esta bodega, como por ejemplo el Vendimia Seleccionada Don Jacobo.
Propuestas de armonía
Este vino al estar menos estructurado que el reserva se presta a más situaciones y armonías. Sin duda sigue siendo perfecto para acompañar a platos de carne con sabores potentes; como platos de caza, ya sea guisada, estofada o en parrilla. Asados de cordero o cochinillo, aunque sean carnes blancas. Quesos grasos y embutidos picantes.
En nuestro caso, preparamos un arroz a la zamorana, un arroz típico de Zamora con carnes y pimentón, donde el toque ligeramente picante precisa un vino que no se apague. Seguramente con una buena pieza de carne a la parrilla, el resultado sería igualmente interesante.
Y bueno; tras disfrutar, por lo hemos hecho, de estos dos vinos se sigue demostrando nuestras impresiones de una cierta evolución en la DOCa. Rioja hacia vinos más afrutados, aunque aún siguen existiendo las líneas más conservadoras de largas crianzas con una fuerte presencia del trabajo en madera. ¡Qué no es en absoluto malo! aunque no es nuestro gusto particular, pero sabemos diferenciar el trabajo bien hecho. Como es el caso. Estamos frente a un vino muy interesante y recomendable, para quien guste de este estilo de vinos.
¿Y vosotros? ¿Habéis probado estos vino tinto Altos de Corral, de bodegas Don Jacobo? ¿Conocías esta bodega o sus vinos de otras experiencias? Contadnos que os pareció en un comentario, seguro que es muy interesante.
