A esta receta nos resistimos mucho tiempo porque creíamos que era algo complicada; pero, preparar unas almejas a la marinera con esta receta carece de todo misterio, y lo mejor de todo, es muy rápida de preparar, están buenísimas, y además estas almejas están indicadas en la dieta de los 31 días, de Ágata Roquette.
Origen de la receta
Según parece esta receta es muy típica de Galicia, lo cual no nos extraña nada, puesto que el trabajo de marisqueo era muy habitual en el pasado entre las mujeres de los pescadores, que recolectaban marisco en las playas de las rías gallegas.
Con el tiempo, estas recetas de aprovechamiento de los recursos marinos terminó transformándose en algo chic y no solamente muy valorado, si no, hasta caro. Nosotros hemos versionado la receta original propuesta por la dieta, que es la que recomendamos.
Ingredientes de estas almejas a la marinera
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Cómo elaborar estas almejas a la marinera
1.- Lo primero es lavar bien las almejas, para que no arrastren arena. Para ello las pondremos en agua con sal durante un par de horas. Las propias almejas filtran el agua para expulsar la arena.
2.- En una sartén con mucho fondo, o en una cazuela u olla, pondremos a calentar un buen chorrito de aceite de oliva; Cuando esté caliente, añadimos los dientes de ajos que previamente habremos laminado.
3.- Cuando el ajo empiece a dorarse, podemos añadir la cucharada de harina, que hará de espesante de la salsa. Para que quede bien, trabajaremos esta harina en la sartén para que se disuelva completamente; Tras esto, podemos añadir el vino blanco y las almejas.
4.- Podemos añadir las almejas que teníamos limpiando en agua salada. Por efecto del calor se abrirán solas. Si alguna permanece cerrada, no se debe comer. Iremos agitando la cazuela, mientras picamos el cilantro o el perejil y exprimimos el zumo del limón.
5.- Seguiremos agitando la cazuela con las almejas durante un par de minutos, y tras esto, añadimos el zumo del limón y el cilantro. También es el momento para corregir, si fuera necesario, con algo de sal fina y el toque último de pimienta.
Dejamos que repose fuera del fuego la sartén un minuto antes de servir, y emplatamos en un plato hondo, que pueda contener algo de este caldo. Además, a modo de complemento, puedes añadir en un plato aparte unos espárragos cocidos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Propuesta de maridaje
Este es un plato típico de mar y de marineros del norte. Así, en esta ocasión vamos a tirar de tópico con estas almejas a la marinera con vinos blancos de la cornisa atlántica y cantábrica.
Los mejores vinos serían, desde nuestro punto de vista, un albariño, un ribeiro o un txacolí, que tienen ese toque último salado que armoniza perfectamente con las almejas. Aunque siempre se puede tirar de otro clásico, un verdejo bien fresquito.
Así, como has podido comprobar, preparar estas almejas a la marinera no tiene ningún misterio, y además de estar riquísimas, están incluido dentro de una dieta de adelgazamiento. ¿Cómo preparas tú unas almejas a la marinera? Déjanos un comentario con el vino con que hubieras maridado este plato.