En esta ocasión, queremos compartir una receta sencilla para disfrutar de un pescado tan bueno y saludable como es el salmón. Esta receta de Salmón con salsa de azafrán, es además de una receta en sí, la receta de esta sabrosa y sencilla salsa de azafrán, y la técnica para preparar salmón, de una forma sabrosa sin que se pierda su sabor.
Origen de la receta
Para esta receta no podemos fijar un origen, más allá de prueba y error. Especialmente, la técnica para dar ese toque perfecto al salmón la aprendimos de nuestras madres, por lo que no podemos deciros si es genuinamente suya, o bien la aprendieron de otros. La verdad es, que el resultado es exquisito y se puede usar para preparar salmón a la naranja, con salsa de azafrán, o como queráis.
En cuanto a la salsa de azafrán, no deja de ser una salsa basada en la cocina francesa, donde al final, la nata termina aglutinando un ingrediente que se ha freído y finalmente, todo triturado para hacerla más fina.
Ingredientes para nuestro salmón con salsa de azafrán
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Cómo elaborar salmón con salsa de azafrán
Vais a ver qué sencillo es preparar este sabroso plato. Como ya os hemos adelantado tiene dos partes. Por una, la salsa de azafrán; mientras que por otra, será la técnica para hacer un riquísimo salmón a la plancha, que podéis usar para juntarlo con muchos tipos de salsa, como esta salsa de azafrán, salsa de naranja, o salsa rosa
1.- Vamos a empezar preparando la salsa, puesto que puede aguantar mejor que el salmón, que es hecho y comido. Empezaremos troceando la cebolla y pasándola por la sartén para que se poche. Para ello, añadimos un poco de aceite de oliva virgen y una pizca de sal. Si acaso al final podemos afinar de sal.
2.- La sal que añadimos es simplemente porque queremos para que suelte su jugo. Con el aceite caliente, luego lo bajaremos y taparemos la sartén. Unos 10 minutos, removemos de vez en cuando con una cuchara de madera.
3.- Mientras se pocha la cebolla, lavamos y troceamos el puerro. Luego lo añadiremos a la sartén, para que se poche con la cebolla.
4.- Cuando las dos verduras estén bien fritas, añadimos la nata para cocinar. La cocinamos un poco, y tras esto podemos añadir las hebras de azafrán, o el azafrán en polvo. Además de colorear la salsa, se da un toque muy especial.
5.- Tan solo queda dejar que se enfríe un poco, tiempo que usaremos para hacer el salmón, y luego lo trituramos para que quede una salsa homogénea; y si acaso, rectificamos con un poco de sal, al gusto.
6.- Para preparar el salmón a la plancha, vamos a calentar una sartén antiadherente, con un poco de aceite de oliva virgen. A la sartén, le añadimos una especie de ‘cama’ de sal. Ayuda a que no se pegue.
7.- Cuando la sartén esté bien caliente, ponemos el salmón por el lado de la piel. Os aconsejamos que el salmón lo compréis con piel. La grasilla que tiene entre la piel escamosa y la carne es lo que le da su sabor característico. En la parte que queda a la vista, le ponemos otro poco de sal.
8.- Tapamos la sartén y dejamos hacerse a fuego bajo durante 3 minutos. Se cocina en una mezcla de ‘a la plancha’ y ‘al vapor’. Después de esos 3 minutos, le damos la vuelta y dejamos otros 3 minutos por ese otro lado. Siempre tapado no lo reseca y queda muy jugoso.
Y ya solo queda presentar el salmón con la salsa de azafrán. Nuestra propuesta es en un plato, dos filetes y un poco de salsa; luego la salsa sobrante, mejor en una salsera, para quien quiera añadir más. Una especia que siempre funciona fenomenal con el salmón es el eneldo.
Propuesta de maridaje
El salmón es un pescado muy rico, pero no posee un sabor excesivamente fuerte, esto hace que el maridaje precise, desde nuestro punto de vista, un vino ligero. Aunque no somos defensores a ultranza del tópico de “blancos para el pescado”, en este caso, no nos queda más remedio que sugeriros que el maridaje perfecto para este salmón con salsa de azafrán sea un vino blanco joven y afrutado.
En nuestro caso, disfrutamos con un vino blanco de la DO. Rueda, sauvignon blanc. Un varietal muy versátil y de fáciles armonías. No obstante, perfectamente podríamos haberlo hecho con un verdejo tradicional o bien un vino gallego, ribeiro o albariño.
Y cómo ves, con esta receta, has podido aprender dos técnicas distintas. Una para la salsa, y otra para hacer el salmón a la plancha sabroso y jugoso.
Ahora es tu turno, ¿Cómo te gusta tomar el salmón? Cuéntanos en un comentario cuál es tu forma favorita de preparar salmón.
