Seguimos con nuestras pizzas caseras favoritas. En este caso vamos a contaros una forma clásica de preparar una pizza. Se trata de una pizza de atún y cebolla, o como se dice en italiano Pizza tonno e cipolla, fácil, rápida y sabrosa. Como en todas las pizzas que ya hemos compartido, para que sea una buena pizza, lo ideal es que la masa sea casera y recién hecha; por ejemplo, de la forma que te ensañamos hace tiempo de preparar base de pizza casera.
Origen de la receta
Hemos tratado de rastrear el origen de esta forma de preparar pizza, aunque no hemos localizado nada concreto. Lo máximo que hemos encontrado son referencias que apuntan a las versiones sicilianas de la “vera pizza napolitana”.
En base a esto, nos aventuramos a que esta es una pizza de marineros, ya que es una forma muy simple, usando piezas de carne de atún, pescados en la zona de la isla, que es un paso necesario por el mediterráneo. Tan solo es necesario contar con unas cebollas para preparar esta pizza.
Ojo, esto son solo suposiciones en base a la historia de otras versiones de la pizza.
Ingredientes de una pizza tonno e cipolla
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Cómo preparar una pizza tonno e cipolla
1.- Partiremos de una base de pizza, tal y como te enseñamos a preparar, aunque puedes usar unas compradas. Las ha frescas de bastante buena calidad, pero nosotros recomendamos hacerla en casa. Estiramos la masa de pizza para darle una forma redondeada. No es bueno estirar al límite, pues perderíamos el efecto de la levadura que luego nos va a dar algo de volumen.
2.- Sobre la base de pizza, añadimos una generosa capa de salsa de tomate. Podéis hacerla vosotros, o bien usar alguna conserva de calidad; para nosotros, una de las mejores es de la marca Helios. Nosotros, además ponemos algunas especias como orégano y albahaca junto al tomate, para darle algo más de gusto.
3.- Esparcimos el atún en conserva, lo repartimos por la base de pizza de una forma uniforme. Igualmente, la cebolla que tendremos cortada en rodajas no muy gruesas y de estas rodajas hacemos lascas.
4.- Y solo falta añadir queso por encima. Nosotros usamos en este caso un queso de Mahón recién rallado, lo que le da un toque exquisito. No obstante, podéis usar el queso que más os guste; el más original creemos que en este caso sería un queso pecorino, que es un queso de oveja típicamente italiano. Adicionalmente se le pueden añadir algún toque más de especias, pero a gusto. También hay quien le añade algunas olivas negras. No es mal complemento.
5.- Tan solo nos queda hornear. Lo mejor sería contar con un horno de leña, pero como en la mayor parte de las casas, nos tendremos que contentar con un horno eléctrico. Para ello, lo tendremos precalentado. A la hora de hornear la pizza, a calor medio, unos 170ºC y dejar que se funda el queso poco a poco.
6.- Una vez hornada esta pizza, como todas, la dejamos enfriar un par de minutos como mínimo. El toque último siempre se lo da un chorrito de aceite de oliva virgen extra, o bien un aceite aromatizado, como el que os enseñamos a preparar hace ya tiempo. Esto le da un toque especial a cualquier pizza.
Propuesta de maridaje
Para maridar esta pizza, como siempre una de las mejores combinaciones posibles es una cerveza italiana muy fresca. Estas se caracterizan por ser muy suaves y frescas, lo que armoniza perfectamente con esta pizza con base pescado.
No obstante, el día que la preparamos en casa, lo tomamos con un vino blanco de la variedad verdejo. Como en múltiples entradas, esta es la variedad original de la verdecchio italiana, por tanto, es también un maridaje muy atractivo.
Y ya ves, te hemos dado una forma original y sencilla de disfrutar de una pizza hecha en casa, que siempre sabe más rica. ¿Conocías ya esta forma de preparar pizza con atún y cebolla? ¿Cuál es tu forma favorita de preparar pizza casera? Déjanos un comentario contándonos tu forma de preparar pizza casera.
