Llegando los días de calor, apetecen comidas fresquitas, fáciles de preparar y rápidas. Además divertidas de elaborar y que puedes hacer junto a los más pequeños de casa. Nuestra propuesta en esta ocasión son estos huevos rellenos estilo tradicional de nuestra familia.
Origen de la receta
Esta forma de elaborar huevos rellenos es una tradición de nuestra familia, pasado de generación en generación, remontándonos al menos a la bisabuela. Dado nuestro origen, en medio de la meseta castellana, nos da por pensar que estamos frente a una receta castellana; aunque una generación previa procedía de Italia, por lo que podría tener allí su origen, aunque no hemos encontrado nada parecido a lo largo de nuestros viajes por el país transalpino que nos permitiera dar por bueno este origen.
Nosotros, hemos incluido una pequeña incorporación, para dar un poco de más de volumen, y con cierto cuidado, podría ser una tapa o un pincho rápido. Se trata de una cama de patatas, que cortadas en rodajas podrían ser la base de ese pincho.
Ingredientes para elaborar unos huevos rellenos estilo tradicional
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Elaboración de los huevos rellenos al estilo tradicional
1.- Vamos a empezar por lo que más tiempo lleva, cocer los huevos y las patatas. Para ello en sendas ollas o cazos, dependiendo del tamaño pondremos agua a cocer con una pizca de sal. En el cazo de los huevos añadiremos un chorrito de vinagre. Esto hace que se endurezca la cáscara del huevo y luego sea más fácil de “pelar”.
2.- Los huevos necesitan unos 12-14 minutos cociendo, las patatas siempre algo más, en función del tamaño de las mismas. Se sabe que están cocidas cuando podemos pincharlas con un tenedor y no ofrecen resistencia. No obstante, siempre está la opción de cocerlas en el microondas, como ya os comentamos hace tiempo en otra receta.
3.- Mientras se cuecen los huevos y las patatas, podemos ir cortando los encurtidos a gusto. Aquí tenéis libertad para incluir aquellos que más os gusten. Lo ideal es cortarlo todo muy fino. En nuestro caso, hemos usado aceitunas negras, pepinillos alemanes, unas rodajas de cebolleta picadas muy finas y unas alcaparras, pero aquí es a gustos.
4.- Enfriamos los huevos con agua fría para evitar quemarnos. Iremos pelando los huevos uno a uno, y los cortaremos en dos mitades longitudinalmente, separando las yemas de las claras cocidas. Las reservaremos. Las yemas más amarillas y “perfectas” las reservamos aparte. Necesitamos como 5 ó 6 mitades; las otras las iremos poniendo en un bol grande, donde haremos el relleno.
5.- El relleno se hace mezclando en el bol grande las yemas cocidas de los huevos, 2 latitas de atún en conserva, unos pepinillos alemanes, unas rodajas de cebolla cortada muy finalmente y unas aceitunas negras cortadas también muy finas.
6.- Mezclamos el conjunto hasta conseguir una mezcla homogénea de los diferentes ingredientes. Tras esto, añadimos tomate frito, que servirá para ligar el conjunto en un masa flexible. La textura la puedes aligerar añadiendo más tomate. Nosotros recomendamos que se noten bien los diferentes ingredienes.
7.- Tras tener la masa del relleno, vamos a pelar las patatas y cortalas en rodajas. Lo que hay que hacer es una cama de rodajas de patata cocida de aproximadamente 1 centímetro. Este paso es un añadido a la receta familiar, que sirve para dar algo más de volumen. Adicionalmente, se pueden cortar rodajas que se reservan y sirven de base para una tapa tipo pincho, con el huevo relleno encima.
8.- Ahora tan solo hace falta rellenar con la masa las mitades de huevos que cortamos al inicio. Que no os importe saliros de la cavidad interior de cada medio huevo. Perfectamente puede ir simplemente bajo él. Estos huevos los iremos colocando de forma ordenada en la bandeja, sobre la cama de rodajas de patata.
9.- Y tan solo nos queda poner mayonesa sobre estos huevos que los tape. Es mejor usar una salsa fina, porque es más ligera y se extiende mejor, haciendo que no sea necesario usar tanta mayonesa. Sobre la mayonesa iría la decoración. La más básica sería simplemente con las medias esferas de yemas que hemos reservado. Os sugerimos poner algunas enteras y otras, las menos perfectas, hacerlas migajas con las manos sobre la bandeja.
Adicionalmente, se puede decorar con tiras de pimientos del piquillo; haciendo algunas formas; y ya si eres un manitas, hacer alguna figura. Habitualmente solemos hacer una flor, aunque este día en concreto no teníamos pimientos.
Propuesta de maridaje
A este plato solo le falta meter en el frigorífico para que a la hora de consumir esté fresquito, ya que como os dijimos es un plato ideal para el verano. Como acompañante, os vamos a sugerir algo fresquito también. Perfectamente una cerveza rubia muy liegera podía ser una maridaje fácil, pero en este caso, nosotros nos decantamos por un vino joven, afrutado y .
¿Y por qué no? Como finalmente hicimos nosotros en un picnic familiar, con un vino blanco semidulce. Este día tomamos un semidulce de Bodegas Muelas. Impresionante, sobre todo bien fresquito es un maridaje perfecto.
Y bueno, ya sabemos que formas de preparar huevos rellenos hay muchas, aunque dificilmente alguna más sencilla que esta, ¿Verdad? Cuéntanos cuál es tu forma favorita de huevos rellenos, ¿Se parece a esta propuesta que te acabo de hacer? Déjanos un comentario con tus experiencias.