Casi no sé si deberíamos considerar esta receta como un plato en sí mismo, pero dado que puede ser interesante incluirlo a modo tapa o entrante en una comida, vamos a dedicar esta corta entrada a esta receta de Bruschette al pomodoro e formaggio.
En Italiano, estas tostas o canapés se denominan más comúnmente Antipasti, que equivale a los Entrantes en Español. Existen infinidad de formas de condimentar, pero en esta receta, te voy a dar una sugerencia. No obstante, existen tantas formas de preparación como puedas imaginar.
Origen de esta tosta
No creo que exista un origen único de esta forma de hacer tostas, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de una versión, que por los ingredientes, combina elementos muy mediterráneos que se encuentran en muchas cocinas típicas italianas, como por ejemplo, la napolitana.
Productos frescos, sencillos pero de gran sabor, Y sin más, y vamos a la elaboración.
Ingredientes de Bruschette al pomodoro e formaggio
· 1 tomate picado. · Mozzarella picada. · Orégano. · Tomillo. · Albahaca fresca (opcional, pero recomendable) · Aceite de oliva. · Tostadas (sugiero usar las que venden que ya vienen untadas con ajo y perejil). |
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Preparación de Bruschette al pomodoro e formaggio
1.- Picamos el tomate y la mozzarella en taquitos muy finos. Aproximadamente de 2 a 4 milímetros de lado.
2.- Estos trocitos los ponemos en un bol al que añadimos un poco de sal y aceite de oliva para que no se oxide el tomate. Podremos en este momento añadir las especias que queramos. Yo sugiero orégano y tomillo ya que son muy frescas.
3.- Removemos todos los ingredientes para que se mezclen bien y lo vamos a dejar macerando como media hora para que se unan los sabores.
4.- Ya solo falta ir poniendo esta mezcla sobre las tostas de ajo y perejil. También si tienes ganas puedes cortar rebanadas de pan y tostarlas tú. Será mucho más fresco. En este caso te sugiero untar ligeramente la superficie con un poco de ajo.
5.- A modo decorativo, sugiero poner si tienes, algunas hojitas frescas de albahaca, ya que le darán toque de frescura y color a las tostadas.
Y ya está, no tiene más. Es algo laborioso, ya que hay que picar muchas cosas de una forma fina, pero no es para nada difícil.
Propuesta de maridaje
Este tipo de entrantes puede acompañarse con casi cualquier vino joven. Podría ir muy bien un vino con algo de aguja, como un semidulce, o el tradicional vino frizzante italiano por excelencia, el Lambrusco, pero busca que sea de los buenos, no todos son iguales.
Como has podido ver, puedes preparar un entrante que combine perfectamente dentro de un menú de cocina italiana, sin apenas esfuerzo.