Si algo aprendimos muchos durante la pandemia del 2020 es a hacer panes, pizzas y pasteles sin horno. Eso mismo nos pasó a nosotros que nos trasladamos a una vivienda que no tiene horno porque no solemos usarlo en ese lugar. Pero después de un tiempo, quisimos hacer este tipo de recetas, así que tuvimos que aprender diferentes técnicas para elaborar, por ejemplo, una pizza sin horno. Y a ver, no es perfecta, pero está bastante buena.
En esta receta, os vamos a proponer una pizza margherita y una pizza bianca. En ambas, lo común será que haremos una masa sin horno, usando una sartén al fuego. Luego, el gusto, es un tanto a vuestro antojo.
Origen de la pizza sin horno
Sobre la pizza blanca, o pizza bianca, te recomendamos visitar nuestra publicación sobre esta pizza que no lleva tomate. Podéis hacerla con una bechamel o directamente con mucho queso. Sobre la pizza margherita, es la base de la mayor parte de las pizzas actuales.
En cuanto a la técnica de elaboración sin horno, estuvimos investigando varias técnicas que encontramos por la red, y te vamos a contar la que mejor nos funcionó; la más sencilla y la que más usamos durante el largo confinamiento inicial.
Ingredientes para hacer la masa de una pizza sin horno
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Ingredientes para la pizza margherita
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Ingredientes para la pizza bianca
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Cómo hacer la masa de la pizza sin horno
Primero os contaremos la técnica básica para hacer esa masa de pizza sin horno. Luego, el gusto es a vuestra elección. Os proponemos dos versiones muy distintas, una clásica Margherita, la base de la mayor parte de las pizzas; y la Pizza Bianca, que es una versión sin tomate.
1.- Ponemos a calentar a fuego bajo o muy bajo una sartén que tenga tapa. Ha de conservar el antiadherente correctamente, para que luego no se pegue; e iremos añadiendo los ingredientes que hemos indicado y en las cantidades indicadas.
2.- Removemos con una cuchara de palo tratando de homogenizar. Veréis que os queda un masa espesa, con paciencia podéis ir creando una capa uniforme por toda la sartén.
3.- La masa está lista para “hornear”; pero es el momento de añadir los ingredientes que diferencian una pizza de otra. Ya sabéis, tenéis que elegir los de la pizza blanca o los de la pizza margarita.
4.- Una vez puestos sobre la masa, se sube el fuego a un calor medio con la tapa puesta. Que tenga un pequeño respiradero; aunque los 10 primeros minutos se hace con un trapo de tela tapando este agujerito.
5.- Pasados esos 10 minutos, retira el trapo y dejadlo tapado otros 5 minutos más a fuego bajo. Para que termine de hacerse.
6.- Pasados esos minutos, llevado a un plato de pizza y dadle el toque de aceite de oliva virgen extra y algunas especias si os gustan,.. hará que quede fantástica.
Propuesta de armonías
Estas pizzas son muy básicas. Las podéis combinar con lo que más os guste. Hay mucha gente que la toma con cervezas, en este caso, os sugerimos las cervezas italianas, como la Moretti, que es muy suave. Aunque esto es a gustos.
Nosotros somos más de vinos, como bien sabéis En esta ocasión tomamos un vino blanco verdejo, el Castelo de Medina, un blanco clásico que funciona muy bien con la gastronomía italiana, tanto pastas, como pizzas, o platos con queso. En este caso, estaba fantástico.
Y ya veis que fácil y sencillo es hacer una pizza sin horno en casa. Sin duda no es tan perfecta como una pizza hecha en horno, incluso eléctrico; porque el mejor es un horno de leña.
¿Y vosotros? ¿Probasteis a hacer pizzas sin horno durante el confinamiento? ¿Cómo fue vuestra experiencia? Contadnos qué receta seguisteis para hacer pizza sin horno.