Es uno de los pescados más fáciles y sabrosos de preparar, así que os queremos proponer una más, que está además deliciosa. Se trata de salmón a la naranja, que es un salmón a la plancha con una crema de naranja casera.
Origen de la receta
Poco se puede decir de esta receta, ya que es muy simple y posiblemente no podamos rastrearla lo suficiente como para adjudicarle un origen. Como mucho, esta versión de la salsa de naranja, que en realidad es una mezcla de una bechamele muy ligera que se consigue con una reducción de zumo de naranja.
Adicionalmente, a modo de espesante, hemos usado harina de maíz o maicena y una disolución de agua y almidón de cocer pasta; de esta forma hemos conseguido un crema ligeramente gelatinosa y muy suave.
Ingredientes de nuestro Salmón a la naranja
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Cómo elaborar este salmón a la naranja
Es posible que existan otras formas de preparar una salsa de naranja, esta es muy fácil y relativamente rápida de preparar. Además, podrías usarla para acompañar a otro tipo de alimentos, como un solomillo de cerdo, o pollo a la plancha con alguna especie.
Empezaremos por lo primero, que será preparar el salmón. A la hora de comprarlo, nuestra sugerencia es que es mejor el corte en libro de los lomos del pescado, ya que de esta forma la piel, donde se encuentra la grasa del salmón, con el famoso Omega3, está más protegida del calor.
1.- Lavamos con agua y dejamos secar los trozos de pescado. Al mismo tiempo, en una sartén, esparcimos sal marina y una gota de aceite de oliva virgen extra. Calentaremos a fuego fuerte al inicio, aunque cuando pongamos el salmón, primero con la piel hacia abajo, lo podremos bajar a la mitad.
2.- Para que se haga bien, primero salamos ligeramente el lado sin piel y luego tapamos la sartén con una tapa; Bajamos el fuego a la mitad y podemos poner un temporizador a 3 minutos. Tras este tiempo, podremos dar la vuelta.
3.- Por el otro lado haremos igual, un fuego fuerte para que tome calor, y luego media vuelta y tapamos nuevamente, poniendo un fuego medio durante otros 3 minutos. Cuando termine, lo dejamos sin descubrir y apagado unos minutos. Así habremos dorado la capa superficial y estamos terminado de hacer el interior «al horno», quedado muy jugoso.
4.- Emplatamos con la piel hacia abajo y la carne hacia arriba. Lo podemos reservar.
5.- En un cazo o sartén aparte, vamos a calentar la mantequilla. Además, vamos a añadir la grasa que se haya quedado en la sartén de hacer el salmón. Arrastra jugo del propio salmón, así como el toque de sal adecuado.
6.- Cuando esté bien caliente y desecha la mantequilla, añadimos las tres cucharaditas de café de harina de maíz. Es como si hiciéramos una masa de croquetas, o una bechamel. Aunque en este caso, vamos a añadir el zumo de la naranja y el agua con almidón, si lo tenemos.
7.- Ahora hay que remover y remover con una cuchara de madera. Cuando esté todo bien disuelto, es cuando añadimos el queso rallado. Esto actúa de espesante y además aporta sabor. En este momento, solo queda seguir trabajando la crema hasta lograr una textura agradable.
Pues ya está listo. Vamos a poner esta salsa de naranja cubriendo el salmón. Sobre él, para darle color y aroma fresco, podemos añadir eneldo, que es una especia que armoniza muy bien con el salmón. A nivel decorativo y aromático, también podéis rallar un poco de piel de naranja; también le aporta aroma al plato.
Propuesta de armonía
El salmón es un pescado sin un sabor muy fuerte, por lo que quedan descartados los vinos tintos, salvo los jóvenes. La combinación más clásica sería un vino blanco verdejo o albariño; muy típicos.
Pero nos atrevimos con una propuesta muy interesante como la que os vamos a presentar. Tomamos este salmón a la naranja con un vino blanco con crianza, procedente de Bodegas Santalba, en la DOCa. Rioja. Se trataba del Santalba blanco reserva 2016. Un vino con muchos matices interesantes; que, si bien no posee la frescura de los vinos jóvenes, lo compensa con intensidad de otros sabores, de forma que se armoniza de maravilla con este plato de pescado, tampoco muy típico.
Y ya veis, hay más alternativas al salmón al horno; que, aunque muy bueno, también puede quedar seco y aburrido. Con esta receta, además habéis aprendido una salsa que podéis combinar con otros alimentos.
¿Y vosotros? ¿Conocías esta receta de salmón a la naranja? ¿Cómo preparáis el salmón? Compartid con todos nosotros, cómo es vuestra forma favorita de tomar salmón, dejando un cometario. Seguro que es muy interesante.
