Apenas acaban de pasar estas fechas tan especiales, donde se han vivido, disfrutado y compartido, grandes momentos con los seres queridos y amigos, donde se han degustado platos y vinos que igual en otro contexto no son tan habituales, queremos invitaros a alargar este sentimiento que saca al chef o al sibarita que lleváis dentro.
Y como también a los chefs de la casa, tenemos derecho a que nos mimen, y recibir el amor familiar, sin el estrés de los fogones, pues es posible encontrar alternativas, ya no solo para las fechas de Navidad, si no, también para otras celebraciones a lo largo del año.
Por qué contar con una empresa de catering para eventos es una estupenda opción
Esa alternativa puede ser la contratación de un servicio de catering para celebraciones, que en ya cada vez es algo menos inusual. Y es que lejos del concepto que todavía se tiene por parte de los escépticos, un servicio de catering no tiene por qué ser caro, o por lo menos no tiene por qué serlo necesariamente, ya que existen empresas especializadas que ofrecen menús deliciosos para todos los bolsillos, con elaboraciones caseras.
Además de eso, contratar un servicio de catering en Madrid supone otra serie de ventajas como:
La más importante. Permite que todas las personas disfruten de la celebración. En un evento, todo es muy bonito, pero hay que ponerse en la piel de quien se queda entre fogones, que aunque disfrute cocinando, se puede encontrar solo y lleno de nervios para conseguir el plato que quiere presentar, mientras el resto de invitados disfruta de la fiesta.
Todo buen menú requiere una buena compra. Al delegar esta gestión en especialistas, también evitas tener que pensar en los ingredientes, las cantidades y todo el estrés previo que ello conlleva, pudiendo invertir ese tiempo en otros menesteres.
No es solo es la comida. Otro detalle que al menos nosotros tenemos en cuenta después de organizar algo en casa, es que hay que devolver la casa a su estado normal, limpiando, ordenando,.. y aunque contéis con un buen lavavajillas, las empresas de catering suministran una cubertería desechable, o bien que se encargarán de llevarse a limpiar. Y aunque hay quien diga que un tenedor de plástico puede estar reñido con la elegancia, una buena empresa tiene controlado este aspecto, combinando estética, practicidad y “que pegue” con el salón.
Posibilidad de degustar platos ejecutados por profesionales. Obviamente, al apostar por un servicio de catering Madrid es apostar a caballo ganador, ya que en cualquier caso, los platos serán un manjar delicioso. En cualquier caso tienen varias opciones para todos los gustos y bolsillos.
Probar sensaciones nuevas en cualquier evento
Se está hablando de un servicio de catering a partir de una gastronomía propia y de menús tradicionales, a los que se les da un toque especial, pero ¿se puede aprovechar estas fechas para contar con un servicio de catering de otro tipo de cocina? Sí, de hecho toda empresa de catering que se precie, debería también estar especializada en otro tipo de comidas más exóticas, para aportar un hecho diferencial a cualquier evento.
En ningún lado está escrito que en cocina siempre se tenga que vivir del “sota, caballo y rey”, porque sí. También podéis aprovechar estos encuentros para sorprender, y sorprenderos, con otras cocinas del mundo; como por ejemplo, la japonesa.
Degustar platos típicos de Japón, como el sushi, el onigiri, el sashimi o el tataki, son unas opciones que además de no estar para nada reñida con el buen gusto, son más económica y menos abundantes que menús más tradicionales tal y como se conocen de muchos hogares.
Sin olvidarse de un buen maridaje
No hay buen evento, sin un buen vino que lo maride.
Ya sabéis nuestra pasión por los vinos, e incluso aunque no seáis tan sibaritas como nosotros, seguro que sabéis disfrutar de un buen vino; y que aunque hay vinos muy versátiles, no hay un vino que valga para todo. En ocasiones, es bueno tener en cuenta que platos se van a degustar, ya que cada alimento pega mejor con unos maridajes que con otros, y aunque no somos, en general, unos integristas de las armonías clásicas, siempre hay unas pautas a seguir.
Por ejemplo:
- Vinos blancos, frescos y suaves son ideales para entrantes, pescados a la plancha y mariscos crudos.
- Vinos blancos intensos, con un ligero toque de barrica, van bien con pescados en salsa y carnes blancas.
- Vinos tintos, más indicados para carnes rojas y quesos curados; aunque no exclusivamente.
- Y si hablamos de cavas y vinos espumosos, no olvidéis conocer el contenido en azúcares, ya que dependiendo de la elección puede ser perfecto para comer con él, o totalmente desastroso.
Por supuesto, siempre tiene que ser vino de calidad que haya pasado por el envero correspondiente.
Y, ¿Qué es el envero? El envero es el punto de partida en el que comienza a madurar la uva, momento en el que empieza a cambiar el olor, color y sabor de éstas y que indica que la uva está preparada para convertirse en vino.
Y ya veis, los cocinillas nos merecemos también que nos traten bien y disfrutar de una buena mesa, incluso en nuestra casa; aunque no lo hayamos cocinado nosotros.
¿Y vosotros? ¿Habéis usado alguna vez esta opción para preparar un evento? ¿Cómo fue la experiencia? Contadnos cómo fue la experiencia con un servicio de catering.